Tenemos ante nosotros una etapa para disfrutar al máximo de ella. La iniciamos en Fasgar o Fasgare como también se le llama.
Nos situamos en la plaza encima del Rio Gordo que discurre subterráneamente en este punto, aquí tenemos un cartel informativo de esta etapa, la cual se nos quedará grabada para siempre, siendo una de las más bonitas de este recorrido del Viejo Camino de Santiago que denominamos Ruta de la Montaña. En días lluviosos con el terreno y las piedras mojadas tened el máximo cuidado con los resbalones, para que el recuerdo que os quede no sea desagradable y una advertencia más con mucha lluvia o nieve es totalmente desaconsejable ya que puede ser peligroso.
En nuestro caminar por la sierra de Gistredo veremos en el recorrido torrentes, cascadas, fuentes, diversas flores y plantas raras, entre ellas la Pamplina, que en ensalada la sirven en locales selectos y dependiendo de la época de paso, avellanos, servales, tejos, robles, abedules, acebos y mas difíciles de ver corzos, zorros, lobos y dicen que hasta osos y urogallos.
Hecha esta pequeña reseña de detalles y consejos iniciamos la marcha por una pista ancha y con buen firme, la cual se va empinando considerablemente, pero ánimo que solo son tres kilometros. de subida. Encontramos pasos de los llamados canadienses y a la izquierda la Fuente del Abedul, con tres caños y unos versos grabados, buena referencia para comprobar que llevamos la ruta correcta.
Enseguida llegamos a la cima del collado, situado a 1641 metros. de altura. La visión es fantástica, halla abajo el gran Campo de Santiago circundado de altas montañas, que rondan los dos mil metros, destacando el pico Tombaron con 2102 metros.
Iniciamos una fuerte bajada siguiendo el ancho camino que en ocasiones presenta el suelo muy pedregoso.
Se llega a la ermita tras haber andado 3,112 Km., situada a 1487 mts. de altitud, y amigos: esto es lo que escribió Pepe Brotons de Alcoy que en plan conejillo de Indias hizo el recorrido de la Ruta de la Montaña con dos compañeros. No voy a describir lo que cada uno sentimos cuando nos detuvimos en la Ermita de Santiago, rodeados por un circo montañoso que te abruma y que te empequeñece, creo que es mejor vivirlo. Y debajo de la ermita la Fuente Santiago. Dicen que habiendo bebido en ella no enfermas en el resto del año.
En el S. X en esta gran campa se dirimió una gran batalla entre las tropas de Ramiro II de León y las huestes de Almanzor, comandadas por Martin Moro. Aunque los sarracenos eran mas numerosos fue ganada la batalla por los cristianos, con la ayuda de Santiago a lomos de su blanco corcel, siendo construida en su honor la ermita anterior a esta.
CAMPO DE SANTIAGO
1.- Fuiste un campo tinto en sangre 2.- Mudo testigo es tu ermita
Nacido de la historia Desde los siglos pasados
O tal vez de una leyenda Y aunque no estés en los libros
Pero siempre venerado. Por un Papa recordado.
3.- Venían los peregrinos 4.-Hasta que llegó un día
Por el Camino Olvidado Que a ti también te olvidaron
Siendo cientos, quizás miles En favor de otros caminos
Los que por aquí pasaron. Pero estas recuperado
5.- Y pasaran los peregrinos
Caminando hacia Santiago
Para abrazar al Apóstol
Que ayudo aquí a los cristianos.
ADOLFO DIEGO DE MIGUEL.
Historia o leyenda da igual, pero actualmente en este lugar lo que siente el peregrino es alegría y una inmensa sensación de paz. Continuamos el camino por la izquierda en dirección a un paso estrecho, con cuidado cruzamos algunos meandros, los cuales forman el Rio Boeza, y que dependiendo de la fecha, igual nos ofrecen alguna dificultad. Enseguida veremos un monolito al «Camino Olvidado». Esta en el limite de ambos valles.
Se inicia el descenso por una angosta cañada, son seis kilómetros, teniendo al principio el rio en la parte derecha. Enseguida una señal indica el Corral de las Yeguas, desde donde se ve al otro lado del rio una cabaña y en la parte nuestra las ruinas de lo que fue el hospital de peregrinos: Villa Armenia. Pasamos el pequeño bosque del Paleiro formado por tejos y acebos, y seguimos bajando, de frente un rustico puente de troncos, tenemos que cruzarlo, le llaman el Pontón de Salgueiron, y mas abajo otro que también cruzaremos, a este le denominan de las Palombas. Estos viejos puentes de troncos actualmente están renovados.
Pasamos la fuente de Oscar y seguimos el descenso, dependiendo de la época los torrentes y las cascadas producen un ruido ensordecedor, el cual nos acompañara en el descenso, también nos acompañara la frondosidad del bosque, la cual a veces nos cubre totalmente, caminando como por un túnel.
Casi al final la fuente de San Juliano, que dicen posee la mejor agua de la zona, y de repente en nuestra vista las primeras casas de Colinas del Campo Martin Moro Toledano, el cual tiene el privilegio de ser el pueblo de España con el nombre más largo, que también le viene de la leyenda, dicen que las tropas agarenas como antes dijimos, estaban bajo las ordenes de Martín Moro, natural de Toledo.
Colinas es un Conjunto Histórico declarado por la Unesco de Interés Cultural y bien merece la pena recorrer con tranquilidad sus calles empedradas para disfrutar de su rico patrimonio arquitectónico, visible en cada uno de sus rincones.
Aquí tenemos bares, tiendas y también lugares para dormir si así lo deseamos.
Cruzamos el puente romano sobre el Rio Boeza y Salimos de Colinas hacia Igueña por el único sitio posible, pasando por debajo de un arco que parece la puerta de salida de esta población. Este arco forma parte de la ermita de Santa Dorotea cuya festividad se celebra el seis de febrero.
Al poco de reiniciar la marcha, pasada la ultima casa, por la derecha tomaremos una ancha pista, la cual tenemos que seguir quedando el rio repetimos, a nuestra derecha. El camino es ancho y de buen firme además de muy agradable por que discurre por una zona donde el agua es protagonista, dada la cantidad de arroyos y torrenteras que cruzaremos en nuestro caminar, siendo la vegetación exuberante, tenemos que cruzar un puente y unos metros mas adelante un cruce donde seguiremos por el camino de la izquierda por el cual después de pasar otro puente salimos a la carretera siguiéndola hasta Igueña, pasamos por delante del Ayuntamiento y fin de etapa, con la sensación en nuestra mente de tenerla abrumada de tantas bellezas naturales vistas en el día y que no olvidaremos fácilmente. Aquí tenemos toda clase de servicios, incluso playa fluvial si es el tiempo de disfrutarla y nos apetece.
Para comer y dormir:
Colinas del Campo Martin Moro
Casa Rural Trallera 987693254 676415797
Casa Rural La Corte 987530094 659712225
CasaRural La Gortina 987693254 676415797 Igueña
Albergue de peregrinos 987519517 , tienen la llave en el bar La Playa 636968047 y 629251182
Casa Rural Begoña 987 553 288 – 666 662 750
Para comer,
Bar Anibal 634589709
Los ciclistas pueden seguir el mismo recorrido, pero de Fasgar hacia arriba con un esfuerzo considerable, y el descenso quizás peligroso, por lo cual conviene que se informen.